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SANTO DOMINGO.- Será este mismo miércoles cuando los jueces del Primer Colegiado de la provincia Santo Domingo determinen si Sterlin Francisco Santos, alias El Panadero, es culpable de violar sexualmente y matar a la niña Liz María Sánchez, de 9 años.
El tribunal presidido por la magistrada Elizabeth Rodríguez Espinal, evaluará las acusaciones que realizó la parte querellante y el Ministerio Público, donde piden que El Panadero sea condenado a 30 años de prisión.
El hecho ocurrió el 16 de agosto del 2020, pero aún las autoridades no han encontrado el cadaver, mientras el acusado declaró que lo había lanzado a las aguas del Mar Caribe, específicamente en el kilómetro 14 de Las Américas.
En la declaración, explicó cómo tuvo contacto con la niña, indicando que el día que la mató le entregaría el celular que ella le había pedido, citándola a su vivienda, ubicada en el sector Ensanche Isabelita de Santo Domingo Este.
Aseguró, además, que al entrar a la casa, la niña le pidió el celular y él le respondió que debía sacar una información, a lo que la infante lo amenazó con decirle a sus padres y amigos que la abusaba sexualmente, por lo que se asustó.
Dijo que ese día comenzó a tocarla como de costumbre y ella se alteró, por lo que la agarró de manera fuerte y brusca, la estranguló y le puso una funda negra en la cabeza.
En el documento instrumentado por el Ministerio Público, dijo que conoció a la niña hacía tres meses, y que dos semanas después empezó a sentirse atraído por la menor, quien se le sentaba en las piernas a jugar con su teléfono personal.
“Yo le prestaba mi teléfono celular para que ella viera muñequitos y jugara los juegos que yo le había descargado para ella, en ese momento me aprovechaba para manosearla y tocar sus partes íntimas, cuando le tocaba sus partes ella se quedaba tranquila, y yo continuaba manoseándola, en diversas ocasiones la Liz Mary visitaba mi casa para jugar con mi hijo”, relató el imputado ante los fiscales.
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