El presidente Danilo Medina resaltó ayer como avances de su gobierno en materia de seguridad ciudadana, el haber mantenido de manera sostenida durante estos cuatro años un descenso en la tasa de homicidios, delito que afirmó, es el más grave a combatir.
Dijo que para hacerle frente a otros crímenes como el robo de celulares o las estafas electrónicas, ha reforzado la seguridad con más miembros de la Policía, mejores equipos, mayor organización, y un aumento salarial entre 10% y 30%.
Durante la rendición de las memorias de su Gobierno correspondiente la última del cuatrienio 2012-2016, el mandatario refirió que en el año que asumió el poder la tasa promedio de asesinatos era de 24.30 por cada 100,000 habitantes.
Señaló en 2013 esa tasa se redujo de 21 a 18, y en el 2014 bajó a 18.2.
“Y esa cifra siguió bajando, y en diciembre del 2015 cerró con 16.7, la más baja desde el 2002; y la tendencia para enero del 2016, era de 16.2”, subrayó, al tiempo de señalar que eso ubicó a la República Dominicana entre los diez países de América Latina con la menor tasa de homicidios.
Medina se refirió también al Sistema 9-1-1, mediante el cual el Estado presta un servicio de seguridad “rápido, eficiente y moderno” para toda la ciudadanía, e informó que muy pronto operará en Santiago, Sosúa, Puerto Plata y Navarrete, y al finalizar el semestre en Haina y San Cristóbal.
Eso es solo el comienzo. El presidente de la República y candidato a la reelección, aclaró, sin embargo, que esas no son las metas deseadas, sino el comienzo de una tendencia que continuará empujando “día a día, barrio por barrio, calle por calle”.
Con esos fines anunció que a partir del martes primero de marzo, serán incorporados al Senasa todos los agentes y sus familiares, los cque totalizan 112,000 personas; continuará la profundización de mejoras en la Policía Nacional de forma paralela con las reformas necesarias en la institución, y tomará medidas cuando las acciones de esos servidores no se ajusten a lo esperado de ellos.
Así, cree, habrá mejores resultados.