«El proyecto del submarino de quinta generación está sujeto a numerosas discusiones y se están preparando diferentes tareas preliminares de carácter técnico. Será una embarcación completamente distinta desde el punto de vista de los campos físicos. Se trata de un submarino unificado, estratégico y multifuncional en cuanto a sus elementos principales», afirmó Alexéi Rahmánov, presidente de la Corporación Unificada de Construcción Naval (OSK, por sus siglas en ruso), informa TASS.
Rahmánov precisó que el rasgo distintivo de los nuevos Jaski de quinta generación serán las armas, pero la Corporación intentará conseguir su unificación. Sin embargo, el Jaski será fabricado no antes de 2030 a condición de que en los años 2017-2018 los ingenieros finalicen el desarrollo del submarino de cuarta generación y empiecen a desarrollar el submarino de quinta generación.
El proyecto de diseño y creación de los Jaski, llevado a cabo por la oficina de construcción y diseño de máquinas navales rusa Malajit (conocida como Malaquita en español) en San Petersburgo, Rusia, deberá finalizar dentro de dos años. Se prevé que los submarinos portarán misiles de crucero hipersónicos. Actualmente en Rusia se construyen submarinos nucleares clase Yasen de cuarta generación.
Entre los requisitos de la Armada rusa para los nuevos submarinos figuran nuevas formas de propulsión alternativas, las formas del casco, las formas del uso de las armas y métodos de intercambio de información basados en nuevos principios físicos. Al mismo tiempo, la táctica de uso de estos sumergibles estará vinculada al concepto de ‘guerra centrada en redes’, una doctrina militar que tiene como objetivo mantener bien conectadas e informadas a las fuerzas geográficamente dispersas.