Europa se encuentra en estado de guerra, la amenaza terrorista está a nivel máximo, ha declarado el primer ministro francés, Manuel Valls.
El primer ministro, citado por BFM TV, se ha solidarizado con el pueblo y las autoridades belgas y ha transmitido sus condolencias a los familiares de los fallecidos en los ataques de Bruselas.
Al menos 21 personas han fallecido y otras 35 han resultado heridas en las explosiones en el aeropuerto Zaventem de Bruselas y en el metro de la capital belga.
Reacciones
«Lo que temíamos se ha hecho realidad. Nuestro país ha visto hoy una serie de repulsivos atentados mortales perpetrados a ciegas», declaró el primer ministro belga, Charles Michel, citado por RTBF.
Los ataques en Bruselas son un «golpe a toda Europa», ha declarado el presidente francés, François Hollande, tras una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional.
Según Hollande, los países de la Unión Europea «deben hacer todo lo posible para repeler la amenaza terrorista».
El ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière, ha afirmado que los ataques no solamente estaban dirigidos contra Bélgica sino «contra la libertad de los europeos y de todos quienes forman parte de la Unión Europea».
Medidas de seguridad
Bélgica ha aumentado el nivel de alerta terrorista al nivel máximo. Según el Gobierno belga, se trata de atentados terroristas cuyo autor podría ser el Estado Islámico.
Francia ha movilizado un adicional de 1.600 policías y gendarmes para reforzar la seguridad en los aeropuertos, estaciones de tren y metro.
Las conexiones ferroviarias entre París y Bruselas han sido suspendidas. Asimismo la frontera por carretera y tren entre Bélgica y Francia se encuentra cerrada.
Las explosiones se han producido tres días después de que la Policía detuviera al yihadista Salah Abdeslam, uno de los autores de los atentados de París del 13 de noviembre de 2015.